Refrenda Acción Nacional su compromiso de combatir la violencia contra las mujeres
Con el objetivo de atender posibles actos de discriminación y violencia contra las mujeres militantes, el Presidente del Comité Ejecutivo Nacional, Ricardo Anaya Cortés, firmó este viernes el proyecto de Protocolo de Atención a víctimas de violencia política.
Con este proyecto, impulsado por la Secretaria de Promoción Política de la Mujer, Marcela Torres Peimbert, se pretende prevenir y atender los casos de violencia política contra las mujeres, a través de la sensibilización y capacitación de las estructuras partidistas y de la militancia en general.
Al respecto, Ricardo Anaya señaló que “este es un tema en el que necesitamos ser implacables” y que necesita visibilizarse, ya que “lo que no se dice no existe, y si las cosas no se visibilizan, no ocurren en la realidad”.
“Visibilizar no es solamente elaborar el protocolo, sino sancionar a quienes lo violen. Ese es el compromiso fuerte que queremos hacer, con medidas ejemplares, de tal manera que el problema quede completamente visibilizado y podamos, en los hechos, lograr una transformación”, detalló.
Como ejemplo, recordó el reciente comentario del Secretario de Desarrollo Social, Luis Miranda, en la Cámara de Diputados, quien dijo a una legisladora “que no la entiende porque no es psiquiatra. Podrán decir que no es violencia de género, pero sí lo es, porque ese tipo de declaraciones nunca se hacen contra los hombres. Siempre este estigma de la locura y la estridencia es una etiqueta que se le quiere poner de manera absolutamente injusta e irrespetuosa a las mujeres, ahí está”.
Como parte de este proyecto se organizó también el foro “Por una vida libre de violencia contra las mujeres”, en el que se contó con la participación de Mónica Maccise, Directora de la Unidad Técnica de Igualdad de Género y No Discriminación del INE; Santiago Nieto, titular de la Fepade; Paula Soto, Directora de Participación Social y Política del Inmujeres; Claudia Valle, magistrada de la sala regional de Monterrey del TEPJF; y Carmen Carreón magistrada del Tribunal Electoral del DF.
Marcela Torres Peimbert explicó que la violencia política contra las mujeres “es un acto de discriminación, motivado por elementos de género, que tiene como objeto el impedimento de la participación en igualdad de condiciones, dando como resultado el menoscabo de los derechos político-electorales”.
En este marco, la Secretaría de Promoción Política de la Mujer propuso como definición de violencia política “las acciones, omisiones, la tolerancia, las prácticas y cualquier acto infligido a una mujer en el ámbito partidista, en su aspiración de postularse como aspirante, precandidata, candidata a un cargo de elección popular o de dirigencia partidista, o bien, funcionarias electas o designadas”.
También se propuso la creación de una comisión especial de atención a la violencia política, en la que se atiendan las quejas de las militantes panistas.
“Es muy importante resaltar que Acción Nacional es el primer Partido que atiende este tipo de quejas, ya que reconoce la importancia de respetar y hacer valer los derechos de nuestras mujeres militantes”.
Actualmente, más de la mitad del padrón de militantes del PAN son mujeres. Mientras que el PAN avanza en este tema, las iniciativas para exhortar a las autoridades locales a poner en práctica el Protocolo propuesto a nivel nacional, siguen pendientes de discusión. Ante ello, Acción Nacional insistirá en que se avance en este trabajo, para que se dictamine, apruebe y entre en vigor el Protocolo, a fin de atender la problemática en materia de violencia política e impulsar la participación de las mujeres en igualdad de condiciones.
